Por Aurora López I.
 
¿Qué piensas de alguien que te promete algo y luego no lo cumple? El cumplimiento de una promesa es una de las muestras que más nos mueve a darle nuestra confianza a alguien,  porque esto nos comunica que somos importantes para esa persona.  Por eso cumplir lo que prometemos  es una cualidad que debemos cultivar.
 
Es mejor que no prometas algo que no estás seguro de poder cumplir, pues si lo haces una costumbre, llegará el momento en que no te volverán a creer. Es mejor que ser honesto e íntegro sea la norma de conducta que respalde todo lo que emprendas.
 
Desde niños tenemos una tendencia natural a confiar, la desconfianza se aprende por situaciones que vivimos y circunstancias que nos rodean,  y aunque poseemos un «don» instintivo para dar o negar nuestra confianza, a veces nos podemos equivocar y por eso es necesario aprender a distinguir quién es y quién no es digno de confianza.
 
Después de reflexionar acerca de este tema, así como los anteriores que hemos compartido, podrías llegar a pensar que son demasiados los requisitos para lograr ser personas con carácter y actitudes valiosas.  La verdad es que solo es uno y  de ahí surge todo lo demás, y es AMAR, porque cuando te amas tú y amas a tus semejantes,  todas las cosas buenas y dignas son más fáciles de hacer.
 
Finalizo este tema con la siguiente frase:
«POCAS DELICIAS PUEDEN IGUALARSE A LA SIMPLE PRESENCIA DE ALGUIEN EN QUIEN CONFIAMOS PROFUNDAMENTE»  (George Mac Donald)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

cuatro × 4 =

Publicar comentario